Aprovechando que había nieve en Urbasa y que estaba previsto ver el sol me dispuse a tener una mañanita agradable pero fría, muy fría. Dejé el coche en el alto de Lizarraga y me encaminé hacia el arco de Portupezoleke en principio y hacia las cimas de la sierra de Ollide más tarde. Se caminaba bastante bien y con una ligera brisa del Sur empecé a hacer fotos con las dos cámaras, como si de un pistolero del lejano Oeste se tratara. Aproveché de que la helada había dejado unos carámbanos muy majos en la zona dell arco. En casi toda la mañana me acompañaron unas nubes muy oportunas que le dieron a las fotos el toque adecuado para ser más foto.
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